Existen muchos mitos sobre las verrugas. Seguro que todos hemos oído ese sobre contagiarse de verrugas al tocar a una rana o sapo. Sin embargo, las verrugas, como otras muchas erupciones y afecciones dermatológicas en niños, son causadas por un virus: el virus del papiloma humano.
¿A quién afecta?
Las verrugas son más comunes en niños y adolescentes. Una de cada diez personas se verá afectada en algún momento de su vida. La mayoría de ellas suelen aparecer en manos, dedos, codos, y plantas de los pies. La gente que se muerde las uñas o padrastros tiene mayor probabilidad de tener verrugas. La aparición de numerosas verrugas generalizadas puede ser síntoma de un sistema inmunológico debilitado.
Contraer verrugas
Las verrugas se propagan de una persona a otra de dos maneras:
- Contacto directo de la verruga con piel lesionada
- Contacto indirecto de un objeto que haya tocado la verruga con piel lesionada. Esto puede darse fácilmente en vestuarios, suelos de piscinas, superficies de duchas.
Existe un periodo de tiempo muy prolongado entre el contacto y la aparición de una verruga: entre uno y seis meses.
La prevención es importante: lávate bien las manos, lleva calzado protector en zonas públicas y ten cuidado al practicar deportes de contacto.
Tratamiento para las verrugas
A menudo, las verrugas desaparecen sin ningún tratamiento, especialmente en los niños. Los estudios muestran que alrededor del 60% de las verrugas desaparecen por sí solas en dos años. Por esta razón, esperar pacientemente es una opción razonable, especialmente en niños pequeños donde el tratamiento puede ser traumático y mal tolerado.
El tratamiento de las verrugas a menudo puede generar frustración porque no existe un tratamiento perfecto y por lo general, cualquier tratamiento tardará meses en tener éxito. La razón principal para tratar una verruga es si es dolorosa.
Si deseas un tratamiento, el mejor lugar para comenzar es en casa con este simple régimen de cuatro pasos:
- Remoja la zona afectada con agua caliente durante 10 minutos cada noche
- A continuación, utiliza una lima de uñas o piedra pómez para limar las verrugas suavemente (ten cuidado de no tocar la piel sana, ya que las verrugas podrían propagarse)
- Después de limar, aplica sobre las verrugas una solución de venta libre en farmacias (generalmente contienen ácido salicílico)
- Cubre la zona tratada con la solución con cinta adhesiva y déjala durante la noche. Repite esto todas las noches durante al menos 4-6 semanas y espera a que la piel de la verruga se vuelva blanca y se desprenda con el tratamiento.
Si los tratamientos caseros no funcionan, pide cita en European Advanced Clinic y nuestros dermatólogos te darán una solución adecuada para tu hijo.